Resurrección a medias
Ella tenía una melancolía impulsora, una esperanza manchada de obstinación que no la dejaba vivir en paz. Y estuvo tan contenta cuando vio el cuerpo levantarse entre las velas ardientes. Se estremeció de gozo ante esa presencia renovada, y no le importó ver que el rostro se le cayera a pedazos. Se acercó a besarlo con la pasión de siempre, intacta ante el tiempo. Le arrancó por descuido un mechón de cabello. Sin embargo, ella se arrepentiría de haberlo exhumado: cuando lo quiso incorporar de nuevo a la sociedad, todos los hechiceros notaron que se quedaba postrado en el umbral de sus casas, paralizado, con su mirada ausente y putrefacta. Por: Victor C. Frías ¡Muchas Gracias por leer este MicroRelato! Espero te haya gustado y te estés preguntando qué más sucede. Recuerda visitar también mi página de Facebook y apoyarme con un Like para este material. Entra dando clic en la siguiente imagen: